El futuro automotriz llega a Bolivia con Toyota

La tecnología híbrida del gigante japonés ha ingresado al mercado nacional. El nuevo Corolla 2020 está en Bolivia con una versión híbrida, que incorpora dos fuentes de energía, un motor eléctrico y otro a gasolina.

Invitada especial: Monica Briançon Messinger

Fotos: Cortesía de Toyosa y Monica Briançon Messinger

Los sueños poco a poco se van haciendo realidad para muchos bolivianos, ya que Toyosa, a través de su distribuidor oficial, acaba de traer por primera vez al país un automóvil híbrido que combina la electricidad con la combustión normal. Se trata del Corolla híbrido provisto con una batería de hidruro de níquel, la más eficiente del mercado a nivel calidad/precio, que ofrece más potencia en menor tamaño.

Fue presentado en la Segunda Convención Toyota en Bolivia, realizada en inmediaciones de Casa de Campo, Santa Cruz, donde miembros de Toyota Latinoamérica llegaron al país para dicho acontecimiento. Uno de ellos fue el CEO de Toyota América Latina y el Caribe, Masahiro Inoue, quien sostuvo una entrevista en exclusiva con Libre Empresa.

Inoue-san, como es llamado en las esferas empresariales, o Massa como también es conocido, habló del desarrollo de Toyota en Latinoamérica y el futuro de la empresa en la siguiente década.

PRESENCIA EN LATINOAMÉRICA

El primer distribuidor oficial de Toyota en Latinoamérica fue en El Salvador, hace 65 años, mientras Toyota de Brasil comenzó en San Pablo en 1962, y desde ese entonces «hemos crecido bastante; el año pasado vendimos 47.000 unidades en Latinoamérica y nuestra producción llegó a las 340.000», revela Inoue.

El 20% de los automóviles se produce en las plantas latinoamericanas, el otro porcentaje se importa de Japón y de otros países de Asia, así que no se trata de tan solo ensambladoras, sino de producción real en este continente.

«Tenemos operaciones de manufactura en Brasil, con cuatro plantas en Sorocaba, que produce el Yaris y el Letios; San Bernardo del Campo con autopartes; en Indaituba fabricamos el Corolla y el híbrido, y en Porto Feliz hacemos motores. Tenemos una planta en Cumaná, Venezuela, y en Argentina producimos la HiLux y el 4 Runner», explica Inoue.

Complementa que las operaciones de ventas, marketing y logística de la marca están en 40 países de la región con distribuidores propios o independientes los cuales generan empleo para 12 mil personas en las afiliadas, es decir, donde el accionista mayoritario es Toyota como en Argentina y Brasil.

En otros países están los distribuidores independientes, tal el caso de Toyosa Bolivia.

Además de las cifras, el CEO Inoue señala: «Nosotros creemos en Latinoamérica y en la calidad de la producción hecha por su gente, porque son muy competitivos y están bien entrenados; tienen la habilidad para la construcción y su capacidad es muy buena, además de ser entusiastas y creativos para hacer algo y resolverlo».

MERCADO BOLIVIANO

Inoue manifiesta que en el último año, por medio de su distribuidor oficial que es Toyosa, se vendieron cinco mil unidades, por cuanto el crecimiento fue cinco veces más que cuando comenzó con la venta de esta marca, hace 20 años.

«Vamos a repetir las ventas en Bolivia al igual que el año pasado dado que las elecciones y la tensión social que vivimos impidió que se levanten las ventas. Si las cosas van mejor es posible que se incrementen, pero dependerá del tipo de clima electoral que se viva», complementa uno de los ejecutivos de Toyosa que acompañó a Inoue durante la entrevista.

El Corolla híbrido fue presentado junto a la Hilux GRS 4.0 automática, destinada a otro segmento del mercado.

En cuanto al primero, una de las principales características es que no se tiene que conectar a ninguna conexión eléctrica externa, por lo que genera el 100% de su electricidad de forma autónoma, la batería interna se recarga por el frenado o el rodaje libre del vehículo, y tiene la misma vida útil que el vehículo.

La segunda cuenta con un motor de 4.000 cc VVT-i, de 6 cilindros en V, de 24 válvulas, una potencia máxima de 234/5200 (HP/RPM) y un torque máximo de 376/3800 (N.m/RPM), viene equipada con una suspensión de muelle con dos barras de absorción de impacto y sistema de tracción 4x4.

«Son autos para diferentes mercados —puntualiza Massa—. Este territorio es un gran continente. Brasil, Argentina, Perú y Bolivia son grandes y fuera de la ciudad están los agricultores, por lo tanto, tenemos que darles este tipo de autos a ellos».

«Pero si vemos las grandes ciudades como Santa Cruz, La Paz, Buenos Aires o San Pablo son muy sofisticadas, por lo que tenemos que ofrecerles mejores autos como sedanes, SUv’s o Hutch Backs, por eso les presentamos el auto híbrido, que ya lo vendemos en otras ciudades», agrega.

MOVILIDAD

Este es un concepto que maneja Toyota manufacturera, productora y vendedora que se preocupa por las nuevas generaciones que tienen que pagar por parqueos y seguros que son muy caros y la densidad del tráfico es alta. En otras palabras, son personas que quieren usar un carro, pero no comprarlo; es a ellos a quien se les debe proporcionar la oportunidad para usar un auto.

Eso es movilidad para los ejecutivos de Toyota: producir mejores experiencias para el usuario, inclusive si a ese usuario le falta una mano, un pie o es ciega.

«Toyota y nuestro presidente global, Akio Toyoda, han anunciado en 2019 el concepto de movilidad y este año entrará en vigencia una pequeña ciudad a los pies del Monte Fuji donde se hará una colaboración entre la industria, el gobierno municipal y otras compañías tecnológicas para hacer una ciudad que ofrezca movilidad para todo tipo de personas, jóvenes, mayores, personas con discapacidad; produciremos híbridos y autónomos; tenemos que ofrecer la oportunidad para todo tipo de personas», revela el CEO.

Pero este futuro tan próximo en el Japón será más lejano para Latinoamérica. En cinco años Japón saltará a un mundo autónomo, mientras que por este lado del mundo tendremos que esperar que cada gobierno pueda proveer las

oportunidades y la infraestructura que se necesita para las personas que tienen movilidad reducida.

HÍBRIDO

En cuanto al tipo de automóviles que ofrece el gigante nipón, Inoue expone que «somos productores y distribuidores, por tanto, no podemos forzar a los consumidores a que compren un coche híbrido o una batería para un auto eléctrico. Tienen que escoger cuál es el mejor para su uso. Así que le tenemos que ofrecer opciones, por lo que creemos que el híbrido es una opción para la población boliviana para que pruebe y use. Es muy bueno en cuanto al ahorro de combustible y excelente en aceleración, pues tiene un sistema de encendido y aceleración que es silencioso y muy bueno para los consumidores».

Los otros modelos necesitan una infraestructura que le debería dar el país, es decir, debería poder producir hidrógeno o instalaciones especiales para los eléctricos enchufables.

«En Bolivia vamos a promover el auto híbrido, pero tenemos que tener el soporte del gobierno. Y para que se haga popular entre los usuarios debemos mostrar beneficios a los usuarios como por ejemplo una reducción en sus impuestos, porque están usando un auto que contamina menos. Por ejemplo, en San Pablo, este tipo de autos puede andar todos los días sin tener que someterse a la restricción vehicular porque no contamina. Ese tipo de beneficios es lo que debemos pedir y hacer que los gobiernos municipales y el nacional soporten a este tipo de transporte», solicita Masahiro Inoue.

FUTURO GLOBAL

El consumidor ha aprendido a elegir, quiere autonomía completa donde los automóviles prescindan de un conductor. Para llegar a la conducción completamente autónoma, hay varias fases a superar.

La primera o cero es la que se da comúnmente. Se necesita al conductor para todo y el automóvil, a lo sumo, tiene alguna alarma que pueda alertar en caso de emergencia. La primera complementa la labor humana, pero no la suple por completo como, por ejemplo, los sistemas de control de crucero, los limitadores de velocidad o los sensores de carril.

La segunda incorpora tecnologías capaces no sólo de mantener una orden humana (como la velocidad) o alertar mediante sensores que el conductor está cansado, sino también toma decisiones de forma independiente.

El tercer estadio corresponde a coches que pueden circular ya de forma plenamente autónoma en entornos controlados, tales como autovías o, poco a poco, en ciudad.

El cuarto son coches donde no se requiera al humano en absoluto, incluso prescindiendo del volante en muchos modelos.

El quinto será donde la conducción autónoma será completa en cualquier entorno o vía. En estos vehículos no se habla sólo de conectividad, inteligencia artificial y sensorización extrema, sino de aprendizaje profundo y capacidades predictivas que, al día de hoy, son solamente un sueño.

Es allí donde Inoue-san interviene y explica que para llegar al vehículo sin conductor se necesita el camino inteligente, «para eso necesitamos las alianzas con los gobiernos; lo que podemos hacer es proveer las oportunidades y opciones para la autonomía total, llegar a la quinta fase y preocuparnos por la seguridad».

«Con el Corolla hemos desarrollado el TSS (Toyoya Safety Sense); tenemos frenos automáticos para evitar las colisiones frontales, pero debemos desarrollar un sistema de prevención contra el sueño donde el auto, al detectar eso, lo detiene o lo coloca en camino nuevamente», puntualiza.

«El consumidor escogerá cuál prefiere; si tiene beneficios impositivos porque conduce un auto amigable con el medio ambiente, éste escogerá un auto así. Tenemos que tener un acuerdo entre los gobiernos de La Paz, Santa Cruz y Cochabamba, más el Gobierno nacional para lograr el uso de este tipo de autos, porque es el futuro que todos queremos», asegura el CEO Inoue.

VENTAS

Toyota Latinoamérica tiene el 8% del market share (participación en el mercado) y ha ido creciendo hace cinco años cuando tuvieron entre un 4 a un 5% de participación.

No tiene la expectativita de crecer en volumen, sino de manera sustentable y sostenible en el tiempo, manteniendo las ventas.

El Corolla híbrido se comercializa en Argentina y Brasil desde noviembre y se lanzará en Colombia y Chile donde ya hay híbridos como el Prius y el Rav 4.

En total el año pasado se vendieron unas 16 mil unidades híbridas en la región. Seis mil Rav 4, dos mil Prius y el resto en los otros modelos.

«Toyota viene desarrollando esta tecnología hace muchos años y se ha perfeccionado a un nivel de funcionamiento muy óptimo. Desde el Prius, el primer híbrido de Toyota, lanzado a finales de los 90 hasta la fecha, se han comercializado más de 13 millones de unidades híbridas en todo el mundo» declara Masahiro Inoue CEO de Toyota América Latina y El Caribe.