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Emprendedores, huérfanos del Estado

A pesar de sus iniciativas, son frustrados en el desarrollo y transformación social del país.

 

Por Claudia Natalie Herbas Flores (*)

Cuando decides iniciar con un emprendimiento en el país, definitivamente es lanzarte al mar porque, experimentando tormentas o días soleados llenos de optimismo, sabes si flotas, nadas o naufragas.

En mis charlas con la gente y caminar por las calles observo y constato con convicción y en honor a la verdad negocios reflotando o cerrando sus puertas para siempre, todos con el denominador común: ser huérfanos del Estado y enfrentar diversas historias para hacer realidad un sueño. ¿Por qué?

  • Porque, como emprendedora puedo dar fe de que tributamos sin contemplación alguna desde el día uno que nos inscribimos al Servicio Nacional de Impuestos, midiéndonos con la misma vara a pequeños y grandes empresarios que realizan un esfuerzo personal o familiar al conseguir un capital de arranque. Las hormigas para algunos son iguales a los dinosaurios en un mercado donde el más fuerte sobrevive.
  • Porque lidiamos y combatimos con un flagelo que se ha hecho un mal hábito para muchas instituciones casi normal llamado «burocracia» y «papeleo», que desanima y te hace pensar y preguntarte ¿Ser empresario formal es más caro y difícil que evadir impuestos y no tener tus papeles al día? La respuesta es: claro que es más difícil y cansador. Más aún con un padre Estado que te deja huérfano, sin darte un impulso desde que naciste.

¿Cuál es el anhelo de miles de compatriotas emprendedores? Pues que los actores políticos y económicos tengan voluntad y espíritu colaborativo, y realicen las siguientes acciones con profunda empatía:

  • Que las autoridades del nuevo gobierno, que son de carne y hueso igual que nosotros, se comprometan a idear, innovar y generar nuevas políticas de Estado que favorezcan a los nuevos emprendimientos como la liberación de impuestos los primeros años a aquellos que comienzan a materializar un proyecto empresarial con capital menor a los 20 mil dólares y se adscriban a un régimen especial hasta que los negocios marchen y generen ingresos sostenibles en el tiempo.
  • Que se mantenga el apoyo del Estado para coadyuvar a pagar los sueldos de los empleados con un porcentaje racional que busque beneficiar a dos partes: el pequeño empresario y miles de jóvenes que buscan trabajo para costear sus estudios universitarios.
  • Que el sistema financiero otorgue créditos accesibles y adecuados a la realidad del emprendedor, con tasas de intereses bajas que permitan honrar las deudas dentro los plazos previstos para calificar mejor para un nuevo préstamo.

El Estado: ser más aliado del empresario

El Estado necesita del trabajo sostenido de su principal socio estratégico: el empresario. Sólo así habrá desarrollo y transformación social del país, y se reactivará la economía de manera integral luego de un remezón que sufrió Bolivia en 21 días de paralización de actividades económico-productivas. La factura hoy la está pagando el ciudadano de a pie por el sacrificio de defender la democracia.

Recapitulando los sucesos históricos de la resistencia civil vividos en 2019 por un  futuro más certero y no como el gobierno de Venezuela que ha frustrado el porvenir de su población, Bolivia se paró firme y con convicción volcándose a las calles, sus ciudadanos dejaron de generar ingresos económicos sin trabajar y buscar el sustento diario, sólo por un valor único: el patriotismo y la denuncia con impotencia de un fraude electoral confirmado por la OEA.

Resultado de ese fenómeno social y político que movilizó al país, se nota actualmente el impacto económico en los bolsillos de la gente. En los últimos meses en varias tiendas y negocios han movido pocos sus ventas; sin embargo, con reactivación aún lenta. Ahora, con mayor incertidumbre debido a la pandemia del coronavirus que está golpeando duramente la economía del mundo, China, como un país industrializado y con mano de obra barata, es un gigante que mueve el comercio internacional.

Los gobiernos no podrían cumplir sus metas si no tendrían el apoyo de esos millones de empresarios que pagan impuestos y realizan sus aportes sociales. Los salarios, fruto del trabajo, generan un mayor porvenir y bienestar para las familias con niños, mujeres y hombres que tienen miradas de esperanza para hacer más grande su Patria, pero en condiciones equitativas, racionales y justas.

                       

 TESTIMONIO

Para citar un ejemplo de una vendedora ambulante de papel higiénicos a Bs 20 -el paquete de 6 rollos- «Tengo una deuda de Bs 3 mil a diferentes personas que no me deja dormir. Hoy no cubro ni Bs 200 -a la semana-. Hace 2 años era entre Bs 500 a Bs 700». (Aida T., madre de familia, sola, de 47 años, que trabaja hace 18 años en lo mismo con 4 hijos de 26, 24, 18 y 11 años.

“El emprendedor, que genera trabajos directos e indirectos es un eslabón esencial para generar desarrollo en un país, el otro es el Estado; uno sin el otro no subsisten”.

(*) La autora es Directora de #ACHCOM, emprendimiento en comunicación estratégica, trainings y coachings. Comunicadora social de profesión, titulada de la UCB Cochabamba. Coach Certificada UPB-CDF. Impulsora de acciones en favor de la comunidad. Fundadora de Ciudadanos Voluntarios en Acción #CIVOAC. Mujer patriota con convicción e idealista de un mundo mejor.

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