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COMPETENCIA VELOZ

Competencia veloz de entregas sobre 2 ruedas

Una franquicia llegó a Bolivia hace siete meses y aspira a romper la barrera de las 250 mil órdenes al mes. Cerca de una decena de competidores corren todos los días con la misión de cumplir el deseo de los clientes.

“Pide y recibirás”: es el lema que cerca de una decena de empresas de servicio de compras, “delivery”, tiene como premisa a la hora de atender a miles de clientes que no desean salir de sus hogares o hacen pedidos desde la oficina.

Son unos genios pero no se limitan con cumplir tres deseos y no salen –como por arte de magia- de ninguna lámpara, sino corren a diario montados en sus motos con el objetivo de satisfacer todos los requerimientos que la clientela solicite a la hora llenar la despensa con las compras del supermercado, la farmacia y, siendo más exigentes, las delicias gastronómicas preferidas, ya sean, salteñas, pizzas, hamburguesas o un platillo del amplio menú del restaurante que a uno más le agrade disfrutar.

Creados para simplificar la vida de la gente, en el caso de Cochabamba se distinguen varios de estos emprendimientos, entre ellos: Pedidos ya, Pido ya, SER, Puerta a Puerta, Santiago, Dash, Ideal y Mototax, las empresas de “delivery” más solicitadas por la clientela al momento de realizar alguna orden. 

Se trata de un servicio de transporte de productos y compras que realiza a nombre del cliente todo un ejército de mototaxistas que se desplazan rutinariamente por las calles y avenidas de la ciudad con la sola misión de llevar a tiempo el recado solicitado.

Este servicio se encarga de efectuar todos los pedidos que los parroquianos deseen y de transportarlos hasta su hogar u oficina, en la mayoría de los casos.

Si bien algunos se abocan, en buena medida, a la compra de productos gastronómicos, no hay limitaciones en este negocio, ya que varios de ellos también se ocupan de otros menesteres, como llevar correspondencia, comprar boletos de la flota y –como no- ofrecer el servicio de transporte del cliente sobre dos ruedas. La preferencia por ellos radica en que responden con prontitud, son muy rápidos con el traslado de lo solicitado y cuidan el buen estado del producto a transportar.

 

SER, la más antigua

Uno de los servicios de “delivery” más antiguos en Cochabamba es SER, un emprendimiento derivado de Radio Taxi Ciudad Jardín y en el cual decenas de mototaxistas trabajan a diario respondiendo a las órdenes de la clientela.

En conversación con Carlos Cruz, Cristhian Barbola y Carlos Bernachi, todos ellos de SER, se conoció que dicho servicio lleva cerca de 13 años de vigencia y cuenta con 70 unidades de transporte dedicadas a atender al mercado cochabambino, que se mueve mucho más gracias a la oferta gastronómica.

De 08:00 hasta las 24:00 es el horario de atención que disponen las unidades de transporte motorizado para satisfacer las encomiendas del público con tarifas diferenciadas que varían conforme a la distancia. 

Los jóvenes precisan que en la zona central la carrera cuesta Bs. 8, pasado los puentes sube a Bs. 10 y aumenta de acuerdo a la distancia entre el centro de la ciudad y el domicilio del cliente. 

Atender un recado implica dos carreras: la primera, para ir al negocio en cuestión y recoger el pedido y, la segunda, para llevar el producto a la casa del ansioso consumidor, vale decir, que considerando la tarifa más económica, recurrir al veloz “delivery” demanda Bs. 16.

Los mototaxistas de SER atienden alrededor de 400 pedidos al día, según los entrevistados, lo que significa que en promedio responden satisfactoriamente a 12.000 pedidos al mes y al año podrían superar los 144.000, un negocio donde “pedir” genera un efecto multiplicador que deja satisfechos a muchos.

En este emprendimiento trabajan de manera independiente 70 personas organizadas que son propietarias de sus motorizados. Cobran por sus servicios sin compartir la renta con nadie, sólo invierten pagando una tarifa diaria de Bs. 22.- por el uso de la frecuencia radial que Ciudad Jardín les brinda, tal como lo hacen las empresas de radiomóviles. 

 

Aumenta la competencia

“Tenemos buena clientela, pero está aumentado también la competencia”, comenta Cruz, de SER, mientras atiende el llamado de la radio que lo conmina a dirigirse a un restaurante a comprar comida para una familia en la zona de Cala Cala.

Si bien la competencia ha crecido, también se ha generado una cultura cada vez mayor de pedir todo para la casa y compenetrados de esa nueva necesidad, las empresas que están inmersas en este rubro se han ido adaptando y perfeccionado para brindar cada vez un mejor servicio, respondiendo a las diversas necesidades del consumidor.

Llevar el pedido con prontitud, que el producto llegue en buenas condiciones, que la comida no llegue fría (pizza, hamburguesa) o caliente (postres fríos, tortas o helados) forman parte de los gajes de este nuevo oficio, donde los caprichos del cliente juegan un papel supremo. 

En esto se han especializado varias empresas cuyas motos portan cajuelas especiales para transportar el producto en buen estado. Para las pizzas y comida caliente se usan cobertores térmicos especiales y todo un empaque corporativo para que la entrega goce también de buena presencia, tal como lo hace la franquicia Pedidos Ya.

Pero no sólo los clientes que preparan una lista larga de encargos son los únicos que quedan satisfechos con el servicio, también los diferentes negocios, en especial restaurantes, que encuentran en el“delivery” un aliado que facilita y simplifica sus transacciones.

 

Motivar el consumo

El internet y el uso de las redes sociales se han convertido en aliados muy necesarios para esta modalidad de compra y conocedores de ello, varias empresas de transporte, como Pedidos Ya, ponen al tanto a sus clientes sobre las diferentes ofertas que existen en el mercado de los negocios de comida rápida, productos de vestir, de regalos y otros. 

Combos especiales, dos por uno y promociones que se lanzan en fechas importantes, como San Valentín, el Día del Padre, de la Madre, no pasan de largo para estos negocios que andan muy despiertos y tienen a la “atención” como arma para conquistar al cliente.

No sirve de mucho sólo atender el pedido de los consumidores, sino motivarlos al consumo, ése es el “arte” que han desarrollado algunas empresas para que el negocio se mueva más allá de las necesidades de quien solicite el pedido.

Así se mueve el mundo de los pedidos gracias a las llamadas telefónicas y ahora gracias al whatsapp, Facebook  y las aplicaciones que se pueden encontrar en los dispositivos móviles.

Ahora, digitar el celular y seleccionar el menú para que la encomienda corra es suficiente para que todo el mundo se mueva y una orden llegue pronto a la casa del cliente, situación que también está ocasionando que la gente salga menos y disfrute de sus pedidos en casa.

Cumplir deseos es un negocio que corre sobre dos ruedas en el mundo del “delivery”, un mundo en el que no sólo cuenta que el cliente quede completamente satisfecho, sino con la tentación de repetir otro pedido.

Edwin Carpio San Miguel

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