UNA CRUZADA POR EL TURISMO
Me vienen recuerdos vividos de las actividades hoteleras antes de marzo 2020, el fren Citaesí natural de visitantes, eventos y espectáculos, mostraban una recuperación en las actividades turísticas después de los problemas sociales de fines del 2019.
Inimaginable lo que vendría a pasar , de un momento a otro, la sequía total de la producción hotelera y de los eventos, sin duda dio lugar a la experiencia más dura para el sector, 18 meses funestos. Tiempo muy largo para pensar y repensar cuando terminaría y también que hacer desde las posiciones de la dirección de un hotel. Era muy complicado tener una maquinaria productiva compuesta en su totalidad por colaboradores y ejecutivos, por suerte con la camiseta puesta. Esto generó una verdadera oportunidad de poner a prueba la calidad humana de cada miembro del equipo y probar el verdadero compromiso con nuestra fuente de sustento y la de más de un centenar de familias. Y es así que lo hicimos juntos, el sacrificio compartido, generó la fortaleza de resistir y de prepararnos para días mejores, esta vivencia permite que nuestro hotel salga fortalecido de esta dura experiencia.
Es importante resaltar que se tomó cada opción disponible, para hacer del Hotel un lugar más seguro, capacitando al personal, implementando las medidas de bioseguridad más avanzadas y efectivas para recibir a nuestros huéspedes, ofreciéndoles una estancia segura y placentera.
Son tiempos mejores y veo que las personas hemos cambiado en varios aspectos, entre muchos la visión de vivir más intensamente, de dejar algunas aspiraciones materiales por opciones de vivir y de pasar más y mejores experiencias con nuestros seres queridos, a esto se suma el deseo postergado de viajar, pasear, visitar a nuestros familiares y amigos: un ¡Ya no! a postergar ese deseo de crear momentos inolvidables. Estoy seguro que esos cambios de visión son el mejor cimiento para un “REBOTE DEL TURISMO”, una industria que viene de caer durante meses, debe tener la capacidad de reinventarse, utilizar toda la fuerza de la caída para rebotar, y empezar a reconstruir para volver a crecer.
Esta realidad, no siempre es vista por las personas ni las autoridades, el turismo es uno de los giros económicos que más sectores integra y encadena, el turismo receptivo en cualquiera de sus variantes, trae divisas para mejorar la economía de las regiones. La importancia de revitalizar este sector, que también se ve asfixiado financieramente, con medidas adecuadas, tendrá un enorme impacto en la economía, debería ser un compromiso generar una CRUZADA POR EL TURISMO, donde los diferentes actores de la economía y las autoridades, no dejen pasar la oportunidad de hacer que este rebote del sector, pueda impulsar y consolidar al Turismo nacional.
Tengo certeza que la industria turística del país, nunca será fuerte, si nosotros como bolivianos, no empezamos a disfrutar e invertir en conocer los destinos de nuestro país. El turismo por su crecimiento a nivel mundial es una fuente de recursos y movimiento económico muy importante. Te invito a mirar nuestro país con ojos de turista, a disfrutar de los atractivos nacionales, y a conocer la belleza autentica que guarda nuestra Bolivia.
