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Resiliencia y colaboración para un nuevo modelo de negocio empresarial

Por: Daniela Guzmán Rivero

Las medidas legales para atender la pandemia del covid-19, pusieron a prueba la resiliencia de las empresas, y hoy vemos con profunda admiración, los recursos y capacidades que vienen desarrollando para adaptarse al nuevo contexto y volver esta situación en una oportunidad.

La nueva realidad hace visible la colaboración entre empresas y equipos directivos, desde el estrechar lazos para impulsar su imagen y posicionamiento, difundir sus servicios y productos entre sus clientes, intercambiar servicios, coordinar acciones conjuntas, hasta realizar acuerdos comerciales para la distribución y ventas de los productos. Otra posibilidad que se ha visto en el campo de los servicios, ha sido la unión de capacidades intelectuales y logísticas para crear y ofrecer nuevos servicios y llegar a nuevos clientes.

Estas capacidades de resiliencia y colaboración no solo están facilitando soluciones, sino que está impactando directamente en el crecimiento y posición competitiva de las empresas, y configurando nuevos modelos de negocio, donde la comunicación y comercialización pasan por impulsar la digitalización.

La estrategia ‘win-win’ no solo se ha visto a nivel de las empresas, sino también en las redes vecinales como en la sinergia público-privada para atender la pandemia del covid-19, mostrando que la “unión hace la fuerza” y nos aporta habilidades, experiencias y tecnologías para ser menos vulnerables y resistir mejor el entorno desfavorable.

 

CAMINO

La resiliencia empresarial pasa básicamente por adaptarse a los cambios y alcanzar los objetivos trazados en medio de la adversidad. ¿Cómo somos una empresa resiliente? tranzando un mapa de la incertidumbre y la complejidad que involucre: 1) replantear el futuro de la empresa, 2) identifique las áreas de la empresa de mayor cambio y/o esfuerzo para continuar, 3) cuestione si estamos abasteciendo el mercado, 4) cuestione si estamos programando la producción frente a la nueva realidad, 5) cuestione si el presupuesto puede cubrir las áreas de mayor impacto, 6) revise la demanda y oferta, y las ventas y necesidades de consumo de los clientes. Estos aspectos y otros, sin duda no solo nos ayudaran a repensar nuestra empresa sino también a replantear las alternativas y flexibilidad que tenemos para continuar y adaptarnos a los nuevos retos del mercado.

 

Daniela Guzmán Rivero es abogada y pedagoga social, especialista en antropología del conflicto, conciliadora y docente de postgrado. Gerente General a.i. de la Cámara de Comercio y Servicios de Cochabamba.

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