Marriott Hotels llega a Bolivia con su primer hotel en Santa Cruz

La emblemática cadena hotelera abrió sus puertas a fines de diciembre y busca posicionarse entre los lugares favoritos para el hospedaje del viajero frecuente a la capital cruceña.

Marriott Santa Cruz de la Sierra Hotel se encuentra en el cuarto anillo de la zona de Equipetrol y está destinado para el viajero moderno, ejecutivo, inteligente e ingenioso, empresario e innovador que aspira a ascender con ideas originales, que desea ser tratado como mente brillante y estrella en ascenso y que para ello es fundamental alejarse del trabajo para actualizar su perspectiva y ver nuevos ángulos.
Se trata de un edificio de 19 pisos, altamente tecnológico y moderno, en el que cada uno de los detalles guarda armonía con los estándares de calidad que exige la marca a nivel mundial y cuya filosofía es hacer que cada viaje de negocios sea un placer y que cada vacación resulte en una experiencia de vida inolvidable.
El General Manager del hotel, Gustavo Lovera, explica que la obra comenzó hace unos cinco años y la cadena llegó para darle los toques finales, ya que se trata de un management y no una franquicia, lo que quiere decir que el hotel es operado por Marriott bajo sus estándares y políticas, a diferencia de una franquicia donde los dueños suelen operar.
“Desde el primer momento Marriott va supervisando el crecimiento del mismo, y establece un formato de hotel pragmático, bien operativo que combine diseño de interior y tecnología con lo que sirva en función del terreno”, indica Lovera.

Economía atractiva
Lovera relata la llegada de esta emblemática cadena hotelera a Bolivia por medio de una analogía en la que “si se toma una foto grande y se analizan los últimos diez años, podemos ver a un país con un crecimiento estable, sostenido y la economía más sostenible de la región, con una inflación controlada, con la posibilidad de realizar proyectos a largo plazo. Sudamérica no se caracteriza por eso a no ser por Perú, Paraguay y Bolivia, el resto ha sufrido altas y bajas y cuando observas a Bolivia con sus indicadores se puede pensar en un proyecto a largo plazo y ese es el punto inicial para poner un Marriott en Bolivia”.
Los inversionistas son bolivianos y pertenecen al Grupo Icon, a la cabeza de Carlos Saavedra Bruno; entre todos han invertido cerca de $us 45,7 millones para la edificación de este hotel.
El General Manager del Marriott Santa Cruz manifiesta, por otro lado, que hay estudios previos de mercado y se detectó que Santa Cruz es un mercado corporativo, el principal viajero viene para hacer negocios, otro sector importante es el de eventos corporativos y congresos, además de eventos de corte social, todos ellos pensados en el potencial social de la capital cruceña.
El hotel posee dos salones de siete metros de altura, que en total suman 1000 m2, cuentan con lo último en tecnología acústica, iluminación, una cocina en la parte posterior que puede alimentar a 700 personas simultáneamente.

Comodidad para los huéspedes
El hotel busca que cada viajero tenga una experiencia brillante, con un concepto diferente al tradicional que permite liberar a la mente de los viajeros innovando con espacios ideales para respirar.
Estos espacios están repartidos en 19 pisos, cuenta con 172 habitaciones, 19 suites, entre el piso cinco al 19 están las habitaciones y en los pisos más altos hay 30 habitaciones destinadas para los miembros platinum o gold con amenidades especiales.
La planta baja tiene al Great Room o lobby, salones y restaurante. El lobby es un espacio ecléctico e interactivo donde se puede tomar un café cerrando un negocio, compartir un té con las amigas, disfrutar de espacios comunes, mesas comunitarias, sillones y banquetas en la barra para tomar un trago.
En este espacio hay otro bar llamado Blue Macaw, con capacidad para 40 personas, allí se prepara sushi y combina distintas experiencias, ya que se quiere mezclar al local con el viajero.
“Los hoteles suelen generar esa curiosidad de ambas partes, ya que el viajero quiere sentir la movida interna y el local quiere ver cómo sería estar en otra parte del mundo”, sostiene Lovera.
En el cuarto piso se ubica un restaurante con cocina internacional que viene dirigido por la mano de un chef peruano, tiene espacios para 100 personas y vistas al Urubó, proporcionando distintas experiencias a los comensales.

Otras características
El lobby tiene una iluminación que resalta cada uno de los detalles de la impecable decoración: un bello jardín vertical, que representa la exuberante belleza del oriente boliviano, artesanías de la Chiquitanía que permiten disfrutar de las raíces culturales y artísticas de un pueblo, tallados que representan a los toborochis y un corredor de cerámicas que representan al río Piraí, que se encuentra a pocos metros del hotel.
Marriott Hotels es dueño de 30 marcas, entre ellas Sheratton, Ritz Carlton, Doble V, Westin, Cordial, entre otras, y en función del mercado y al deseo del propietario, así como la realidad de la cadena, se establece un acuerdo y desde ese punto comienza la construcción hasta la fase final, donde ingresa el equipo operativo para darle los toques finales.

El hotel en números
• Capacidad para: 340 huéspedes.
• Empleados: 110 personas, 95% bolivianos, el resto vienen de fuera.
• Inversión: $us 45,7 millones.
• Mucha tecnología empleada para brindar alta seguridad a los viajeros.
• Materiales trabajados con Dry Wall para combatir al moho, la acústica y el calor.
• Parqueo para 130 automóviles, con servicio de valet parking.
• Precio por noche $us 130 a 140.- Los fines de semana podrán haber tarifas atractivas.

El piso 19 tiene un salón ejecutivo donde se sirve desayuno y snacks todo el día, también un pequeño business center y sala de relajación, para que los huéspedes de los pisos superiores tengan un espacio único y diferente.